El diseñador francés Jacques Heim, quien tenía una tienda de artículos de playa en la Riviera francesa, en Cannes, introdujo un diseño minimalista de dos piezas, en mayo de 1946, al cual llamó "Átomo", por ser la partícula más pequeña que existe. Para promocionar su diseño, Heim contrató aviones especiales para que escribieran en el cielo la palabra 'Átomo'.
Al mismo tiempo, Louis Réard, un ingeniero mecánico del automóvil, se encargaba del negocio de lencería de su madre cerca del Folies Bergère en París. Él notó que las mujeres en la playa de St. Tropez, se doblaban las orillas de sus trajes de baño para lograr un mejor bronceado, por lo que se inspiró para diseñar un modelo aún más minimalista. Lo diseñó usando papel de periódico y por primera vez se enseñaba el ombligo. Cuando Réard quiso que modelos profesionales posaran con su diseño, ninguna aceptó, por lo que contrató a una bailarina nudista llamada Micheline Bernardini del Casino de París.
En 1946, concretamente el 1 de julio, Estados Unidos se hallaba haciendo pruebas nucleares en el atolón de Bikini, un conjunto de pequeñas islas pertenecientes a las Marshall (Océano Pacífico). Los norteamericanos, como medida de seguridad, desalojaron a los nativos que allí residían (cerca de 4.000) e hicieron detonar la bomba Able. Unos pocos días después de la explosión, y dada la circunstancia de que ninguna modelo quiso ponerse uno, una popular bailarina llamada Micheline Bernardini se enfundó por vez primera un bikini en un desfile público. La mujer, entusiasmada, declaró al modisto: ¡Ese bañador va a ser más explosivo que la bomba de Bikini!”.
El diseño un poco más moderado de Heim fue el primero en usarse en la playa, pero el nombre dado por Réard fue el que se impuso entre el público. Réard recibió más de 50.000 cartas de sus fans. Incluso inició una campaña para convencer al público que usar un traje de baño de dos piezas no era algo vulgar.
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