Hablando de monoplatos y platos ovalados, que es mejor?

Vas a cambiar a monoplato y te asalta la duda, ¿de que medida?. Lo primero que tienes que tener en cuenta es la medida de la rueda de tu bici 26", 27,5" ó 29". Por ejemplo un monoplato de 28 dientes puede ser ridículo, para camino plano, en una bici de 26", quedarse un poco corto en una de 27,5" y sin embargo podría estar bien en una de 29".

Aquí tenemos que ser conscientes de nuestra forma física y saber bien el perfil de la ruta que vamos a hacer, lo bueno que tiene el monoplato es que es rápido hacer el cambio de un plato por otro. Una vez que hayamos escogido, tienes que tener en cuenta que si nos decidimos por un plato más grande, por ejemplo un 34 en una bici de 29", puede que vayamos cómodos y rápidos en el llano pero al llegar una subida, nuestros cuádriceps seguramente sufrirán más. En de resumen, para una bici de 29", diremos que si lo que más practicas es la modalidad Maratón, lo ideal sería poner un plato de al menos 32 dientes, si estas fuerte sin duda tendrás que ir a por el 34 ó 36. Si quieres que tu bici sea polivalente y te valga tanto para subir como para llanear, lo más mejor sería un plato de 30 con un piñon de 45. Y si lo que te gusta es subir cómodo y no te va mucho el llano, sin duda decídete por el 28.

Pero si vas a pasar al monoplato, y no has probado el plato ovalado, el mejor consejo sería que probaras primero con el redondo y si te adaptas bien prueba el plato ovalado. Reitero que si vas a probar por primera vez la transmisión de un sólo plato, no te dejes llevar por los cantos de sirena que dicen que un plato ovalado de 30 puede llegar a actuar como un 28 subiendo y un 34 bajando. A cada uno le sienta de una manera diferente y lo importante es que si algo no te funciona sepas detectarlo. Si pruebas por primera vez el monoplato con un plato ovalado y no te sientes cómodo, no sabrás realmente si el motivo es uno u otro.   

Hace ya tiempo que los platos ovalados están de moda entre todos los aficionados a practicar el ciclismo, pero son muchos los que aún dudan entre platos ovalados o redondos. Es obvio que el uso de platos ovalados tiene ventajas considerables, pero también ciertos inconvenientes a los que se debe prestar atención.

Ventajas de los platos ovalados

• Desaparición del punto muerto. Los tradicionales platos redondos tenían un inconveniente principal: hay un momento de la pedaleada en el que no ejercemos fuerza alguna. Ese punto muerto, localizado al situarse la biela en posición vertical, hace perder efectividad a nuestro pedaleo. Los ovalados, por el contrario, solucionan este problema.
• El pedaleo es más suave y constante, menos forzado, lo que reduce la presión ejercida sobre nuestras rodillas. Algo que agradeceremos con el tiempo.
• Mejoran considerablemente la capacidad de aceleración y la cadencia de pedaleo.

Inconvenientes de los platos ovalados

• Al empezar a usarlos pueden aparecer ciertas molestias musculares, algo normal teniendo en cuenta que se produce un cambio sustancial en la manera de pedalear.
• Incluso las ventajas arriba descritas, a nivel de rendimiento y optimización del esfuerzo, pueden tardar en apreciarse. Será necesario un periodo de adaptación.
• En ruta las ventajas serán menos apreciables que en el MTB. Aún así te ayudarán a ahorrar bastantes vatios.

En cualquier caso es recomendable someterse a un análisis de pedaleada que determinará la posición y el grado de ovalidad ideal para nuestro caso concreto. Esto se debe a que cada uno, aunque no sea apreciable a simple vista, tiene una mecánica de pedaleo diferente, lo que indicará en el tipo de plato que es más adecuado.